En Silk tomaremos el papel de pastores de orugas de seda gigantes. Los pastos en los que alimentarse son escasos, y la competencia es fiera. En este juego, los participantes encontrarán un nivel de interacción muy importante y aquel que sepa leer mejor el terreno de juego se hará con la victoria.

Las orugas Imomushi producen la mejor seda del mundo, pero solo son capaces de vivir en un ecosistema muy angosto en lo alto de las montañas. La demanda por la seda que producen es altísima, y eso hace que la competencia sea feroz. La vida de los pastores de orugas de seda es un conflicto constante, con los otros pastores o con el Ookami, el depredador de la zona que se alimenta de los rebaños. Gracias a tu fiel mastín y a tu ingenio a la hora de establecer tus rebaños en los campos de las montañas Akaishi, lograrás hacerte con la victoria en Silk. 

Silk es un título diseñado por Luis Ranedo e ilustrado por Roc Espinet en el año 2018. Se trata de un juego de control de áreas en el que el pensamiento estratégico pesará mucho más que la suerte. Es un juego que puede funcionar muy bien con gente que se inicia en el mundo de los juegos de mesa modernos, especialmente con aquellos que disfruten con un cuerpo a cuerpo continuo con los demás jugadores en busca de la posición más ventajosa. Los jugadores más veteranos sabrán encontrar un buen reto al tener que maximizar las opciones que les planteen el tablero y los dados, y será necesario tomar la decisión correcta en cada momento para llevar a cabo la acción más provechosa. 

Los jugadores dispondrán sus piezas sobre las losetas que componen el área de juego: el pastor, el mastín, un puñado de orugas de seda y una granja. Durante su turno, los jugadores colocarán una oruga más desde su reserva y tirarán dos dados, que indicarán qué acciones tienen disponibles. No obstante, los jugadores siempre tendrán la opción de gastar puntos de seda (puntos de victoria) para mitigar el azar y terminar haciendo lo que más les interese en cada momento. 

Las acciones a su disposición son: colocar una oruga en la mesa, para ir ampliando sus posiciones y optar a ganar más puntos; mover al mastín o al pastor, generando apasionantes movimientos en cadena de corte táctico que le dan mucho interés a las jugadas; colocar una valla para delimitar los territorios y proteger al rebaño; construir una nueva granja, lo que ofrecerá un mayor control sobre el tablero; hacer pastar a sus orugas, el auténtico generador de puntos del juego; y mover al Ookami, para alejarlo de nuestros intereses o para hostigar al resto de jugadores. 

Los jugadores irán obteniendo puntos a partir de varias fuentes distintas, y tendrán que decidir si invertirlos para modular las acciones que les proponen los dados o aprender a jugar con lo que sale en la tirada. En Silk las decisiones interesantes están presentes en todo momento. Si os gustan los juegos ligeros de reglas, pero profundos en ejecución, en los que el contacto y la presión con el resto de jugadores sea predominante, no os lo podéis perder.

Si os ha gustado lo que os hemos contado sobre el juego, os animamos a conocerlo en más detalle. Por un lado, podéis ver el videotutorial de Devir para conocer las reglas cómodamente, y también encontraréis la partida de Devir en la que Xavi Garriga, Benjamín Amorín y David Esbrí disputan una partida muy emocionante de Silk.